
El hecho ha tenido lugar el miércoles en los montes de Cional en las primeras horas de la mañana. El cazador y el celador que le guiaba en la cacería fueron avisados por un cámara, que les acompañaba para grabar el rececho, de la presencia del fotógrafo, que se encontraba en la línea de tiro, de cuclillas entre la vegetación y a no mucha distancia del ciervo. Ante el evidente peligro, decidieron suspender el rececho.
El cazador pide daños y prejuicios y la Guardería dice estar desamparada
Tras dar el aviso a la Guardia Civil solicitando su intervención, la decepción de los implicados en la acción venatoria fue aún mayor al no personarse nadie el lugar de los hechos.
No obstante se procedió a denunciar por «los daños y prejuicios» que supone organizar la actividad cinegética, teniendo que dejar el trabajo, costear traslados y otros gastos derivados de esta práctica autorizada.
Los celadores, siguiendo el protocolo, también acudieron a la Guardia Civil para dejar constancia de lo sucedido. Fuentes de la Guardería Medioambiental manifiestan «el desamparo» en el que se haya el sector y el escaso respaldo de la Administración a su personal. Además, señalan que estas actuaciones «repercuten en el aprovechamiento del recurso cinegético y en el desarrollo socioeconómico de la zona». La sierra de La Culebra es un referente en nuestro país por la naturaleza libre de sus ejemplares y por la calidad de los trofeos de ciervo.
El fotógrafo no se enteró de lo sucedido
Por su parte, la persona denunciada cuyas iniciales se corresponden con C.S., dice no haberse dado cuenta de lo sucedido, y sostiene que «de haberlo sabido lo habría hecho a propósito, pues el campo es de todos». Además critica el hecho de cazar «en los escenarios donde se concentra el público. Es cuestión de seguridad y no se puede dejar cazar en días de máxima afluencia. Es Reserva de la Biosfera, Lugar de Interés Comunitario, Zona de Especial Protección de Aves y Zona de Influencia Socioeconómica y todo está subordinado a la caza».
Además añade que «cuando empieza la temporada de caza, enciérrate en el pueblo y en tu casa. No solo te juegas el tipo, sino que te prohíben andar por terreno público».
El fotógrafo, de marcada tendencia anticaza, mantiene desde hace tiempo una actitud de crítica sobre la gestión y los responsables de esta Reserva de Caza.