
El supuesto furtivo está siendo investigado después de que la Guardia Civil haya instruido diligencias para su entrega en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de La Carolina, dando cuenta al fiscal coordinador de Patrimonio Histórico, Medio Ambiente y a la Delegación Territorial de Medio Ambiente.
75 costillas requisadas
Como ha informado el Instituto Armado, los cargos presentados contra el vecino de Bailén son de presunto autor de un delito relativo a la protección de la flora y fauna, acusado de usar artes prohibidas para cazar aves. Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) localizaron en el Paraje Huerta San Vicente de Zocueca, en el término municipal de Guarromán, trampas conocidas como costillas instaladas en una explotación agrícola.
Tras el hallazgo, la zona fue batida minuciosamente por varios agentes. Al detectar un importante número de costillas instaladas entre las hileras de viñedos, se estableció un dispositivo de apostadero con el objetivo de identificar al presunto autor de los hechos.
A las 8:00 horas del día siguiente, los agentes sorprendieron a un vecino de Bailén retirando los medios de captura y con 21 costillas con otras tantas especies silvestres capturadas. Seguidamente, retiraron el resto de trampas y localizaron 33 costillas más.
En total, se intervinieron 54 trampas, además de tres rabilargos, 31 mirlos comunes y un gorrión común.
Las aves capturadas se destinarán a alimentar un centro de recuperación
Las aves intervenidas se entregaron a la Delegación Territorial de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía. El fin de estos animales será, según se especifica en el comunicado de la Guardia Civil, la alimentación de las especies silvestres que se encuentran en el Centro de Recuperación de Especies Amenazadas (CREA) Quiebrajano de Jaén.