Asaja ha querido contar con la participación de los cazadores en esta situación, valorando muy positivamente la relación entre su colectivo, el agrario, y el cinegético.
Una medida teniendo en cuenta al cazador
En este sentido, la asociación ha destacado que en numerosas ocasiones los agricultores han pedido la colaboración de los cazadores para reducir poblaciones cinegéticas que causan daños en el campo o en la ganadería, y el último ejemplo ha sido la plaga de conejos.
Por ello, han desechado realizar una petición de modificación de la Orden de Vedas, reconociendo el perjuicio que sufrirían los cazadores. De esta manera, han preferido plantear que se analice la situación de cada coto y se tomen las decisiones que compatibilicen los intereses de ambas partes.
Su propuesta
Su propuesta pasa porque allí donde no se haya cosechado al menos el 70 por ciento de las tierras sembradas debería posponerse la apertura de la media veda. Además, la Ley de Caza señala que no se podrá practicar la caza sin la autorización escrita de los propietarios de los predios sin cosechar, por lo que el cazador y sus perros no deben adentrarse en parcelas que no se hayan cosechado si no cuentan con esta autorización.